Cómo la presión por ser feliz en verano hace estar más infelices

13/08/2024 - Alba Valle / NoticiasClave.net

La happymanía se hace presente en verano. Foto: © Elina Fairytale.

Los meses de verano son los más ambivalentes del año: los meses de la felicidad… en los que muchas veces no nos sentimos especialmente felices. En parte justamente, porque nos sentimos presionados a esa felicidad.  

En la era de las redes sociales, la presión por tener un verano perfecto y verte maravilloso en tus fotos puede convertirse en una fuente significativa de infelicidad. Las constantes comparaciones y el ideal de una temporada llena de momentos memorables y perfectos pueden llevarnos a un estado de ansiedad y frustración. De hecho, las investigaciones desvelan que cuanto más tiempo pasamos en redes sociales más aumentan los niveles de ansiedad y depresión. 

Las redes sociales como TikTok, Instagram y Facebook se inundan con imágenes de playas paradisíacas, fiestas espectaculares, aventuras emocionantes y por más que seamos adultos que sabemos que esas imágenes no representan la realidad de la vida de los otros ni mucho menos su felicidad, sino que es más un juego de sombras… igualmente nos vemos afectados por esos impactos.

Aún sabiendo que las redes sociales son apariencias, la comparación y la autoevaluación de nuestra realidad del verano versus las expectativas surgen automáticamente y es frecuente que uno siempre sale perdiendo. 

7 recursos que ayudarán a gestionar emocionalmente el verano

1. La motivación es una consecuencia, no una causa

Es importante entender que la motivación no es algo que deba buscarse desesperadamente. En cambio, es una consecuencia de estar involucrado en actividades que nos apasionan y que nos aportan satisfacción. En lugar de presionarnos para sentirnos motivados, debemos centrarnos en encontrar actividades que realmente disfrutemos, permitiendo que la motivación surja naturalmente.

2. Entrenar la mente para vivir el presente

Uno de los mayores enemigos de la felicidad es la tendencia a preocuparnos por el futuro o a lamentarnos por el pasado. Practicar la atención plena (mindfulness) y vivir el presente puede ayudarnos a disfrutar más de cada momento. Esto implica dedicar tiempo a actividades que nos obliguen a concentrarnos en el aquí y el ahora, como el yoga, la meditación o simplemente pasear por la naturaleza.

3. Hacer limpieza mental

Eliminar de nuestras vidas aquello que nos trae más pensamientos negativos es crucial. Esto incluye, en muchos casos, reducir el tiempo que pasamos en las redes sociales o alejarnos de aquellas cuentas que nos generan comparaciones y sentimientos de insuficiencia. También puede significar limitar el uso del ordenador o del móvil para centrarnos en actividades más enriquecedoras. Limpiar cualquier foco generador de negatividad. 

4. Aprovechar el tiempo para nuevas experiencias

El verano es un momento excelente para hacer cosas que normalmente no podemos hacer debido a las obligaciones diarias. Ya sea emprender un nuevo hobby, dedicarnos a un proyecto personal o simplemente disfrutar de entretenimientos que nos hagan felices, aprovechar este tiempo para explorar nuevas actividades puede ser muy gratificante.

5. Aprender a conocerse más

Dedicar tiempo a la auto-reflexión, autoconocimiento y la meditación es fundamental para entender qué nos hace realmente felices. Esto puede incluir llevar un diario, dedicar un ratito a escribir, valorar el tiempo vivido en lo que llevamos de año y meditar. 

6. Centrarse en los demás

Pasar tiempo de calidad con la familia, los amigos y seres queridos puede ser una fuente de gran felicidad. En lugar de centrarnos en nuestras propias experiencias y compararlas con las de los demás, podemos enfocarnos en conectar y disfrutar de las personas que nos rodean. Al fin y al cabo el verano nos regala a través de las vacaciones la oportunidad de poder pasar mas tiempo cerca de las personas a las que queremos y fortalecer los vinculos que han podido debilitarte con el efecto de la rutina.  Estas conexiones humanas son una de las fuentes más poderosas de satisfacción y bienestar.

*Alba Valle es psicóloga sanitaria experta en terapias de tercera generación y mindfulness. Cuenta con la certificación oficial de instructora de mindfulness internacional IMTA y es miembro de la Asociación Internacional de Maestros de Mindfulness y meditación. Véase su liceo formativo en Mindfulness y Meditación, en locasabiduria.com